Selección de entrevistas
Selección de entrevistas
Selección de entrevistas
Selección de entrevistas
Selección de entrevistas
 
 
Más de cuatro décadas de carrera musical lo contemplan. “Spirit Of Man” es su nueva obra en solitario, aprovechando que sus revitalizados Magnum han quedado brevemente aparcados. Reconocido o no, Bob Catley es uno de los grandes.
 
 
BOB CATLEY, uno de los grandes
 
Una entrevista de RAFAEL LLORENTE BERREIROS
para ROCK HARD
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
   
 

RAFA LLORENTE.- El nuevo disco “Spirit Of Man” tiene una onda de Hard Rock muy en la línea de los primeros ochenta...
BOB CATLEY .-
Sí, eso es cosa de los compositores, de esa época es de la que más se han visto influidos. Sí los conoces como yo lo hago la razón es bastante obvia. Ellos vienen de los días de Deep Purple, Free, AC/DC o Led Zeppelin. Sus mentes y corazones pertenecen a esa época. Creo que este álbum es una mezcla de mis tres primeros trabajos por un lado y el último “When Empires Burn” por otro, del cual dije en su momento que se trataba de mi disco de Heavy Metal, y no es que lo fuera en sí, pero de alguna manera para mí era lo más duro que había hecho. Este último es más diverso. Hay Hard Rock melódico con algo de Heavy, un par de baladas... quería expandirme un poco como artista en solitario, y lo cierto es que he quedado bastante satisfecho con el producto final. Ahora veremos si le gusta a la gente e incluso hay quien lo compra (risas).

RLL.- Tu primer disco en solitario fue editado en 1998. ¿Porqué decidiste que aquel era el momento apropiado para hacerlo?
BC.-
Magnum se separó en 1995, y luego vendría el subsiguiente proyecto junto a Tony Clarkin llamado Hard Rain. Yo vivía feliz, así que jamás se me había pasado por lo cabeza. Pero fue por aquella época cuando Gary Hughes (Ten) por medio de la compañía Now and Then se dirigió a mi manager y le comentó que estaría interesado en poder hacer algo juntos bajo el nombre de Bob Catley. Gary había escrito algunas canciones así que decidí escucharlas, me encantaron, y así de sencillamente decidí embarcarme en aquel proyecto en solitario, que en principio estaba concebido para ser sólo un disco, pero luego Gary y la compañía insistieron y terminé haciendo otros dos. A todo esto dio tiempo para que Magnum se reunieran de nuevo, cosa que nunca pensé que podría ocurrir. Les comenté que estaba interesado en la reunión, pero que quería compatibilizarlo con mi carrera en solitario, a lo que nadie se

opuso. Después de estar una época haciendo muchas cosas con Magnum, ahora la actividad ha parado, así que es el momento de retomar mi carrera en solitario. Nunca había pensado antes en ello, pero las cosas
se sucedieron de forma tan natural, y lo estoy disfrutando tanto que ahora quiero
continuar. Estoy feliz haciendo cosas con Magnum y seguiré con mi carrera en solitario mientras a la gente le interese lo que hago.

RLL.- Primero con Gary Hughes, luego con Paul Hodson y ahora has vuelto a cambiar el equipo de compositores para este nuevo disco. ¿A qué se ha debido?
BC.-
Con Gary ya he hecho tres. El ha estado muy ocupado con su proyecto “Once And Future King” y para su propia banda Ten. Habría sido demasiado pedirle además que me hiciera algunas canciones. Es demasiado para él y para cualquiera. Luego escuché algunas demos que Paul Hodson había grabado, me gustaron y le pedí que hiciese algo para mí. Le interesó tanto, que de hecho dejó de lado momentáneamente su disco en solitario y me

 
     
 
 
     
 

escribió “When Empires Burn”, con el que hizo un gran trabajo. Para esta ocasión él tampoco estaba disponible, así que les pedí a los chicos de una banda de por aquí, que se llaman Lost Weekend, que me escribieran algo, a lo que se sumó mi guitarrista Vince O’Regan, quien quería unirse. Entre los tres prepararon un montón de canciones de las que elegí doce. Hubo algunas que desestimé simplemente porque no me parecían apropiadas para mi forma de cantar, pero las que hemos grabado creo que quedan muy bien juntas. Para el próximo disco ya veremos. Ésta vez la compañía no ha intervenido demasiado en estas decisiones, pero quizás para el próximo me propongan algo. Entonces ya lo discutiremos.

RLL.- Contigo siempre me hago una pregunta ¿Porqué siendo un cantante con tanta experiencia, nunca has decidido escribir tus propias canciones?
BC.- No, no, no (risas). No lo sé... . Nunca lo he intentado. Nunca me he visto forzado a hacerlo. En Magnum, Tony Clarkin siempre ha compuesto las canciones, y yo las he cantado. Quizás he podido intervenir en cuanto a su dirección. Las canciones tienen que estar hechas para mi timbre de voz, sino simplemente no las usamos. He tenido la suerte de trabajar siempre con compositores

que hacen ese trabajo mucho mejor de lo que yo jamás podría haber hecho. Yo dejo que lo hagan para mí, y no me importa, siempre y cuando pueda dejar mi impronta en las canciones. Por ejemplo éste está co-producido entre Vince O’Regan y yo. Decido hacia donde tiene que ir la canción, cambio una palabra aquí o allá si pienso que puede quedar mejor, rearreglo la canción, la acorto, la alargo... . En fin, decido hacia donde se dirige y cómo va a terminar siendo el álbum. Puede que no sepa escribir canciones, pero sé reconocer cuando una canción es buena, y creo que sé hacerla funcionar. Puedo ayudar a decir “intenta ésto o aquello”, así que al final tengo mucha influencia en su confección, las hago mías sin haberlas escrito.

RLL.- Tú siempre has estado relacionado con el Hard más o menos melódico o a veces sinfónico. ¿Nunca te has planteado hacer algo totalmente diferente?.
BC.-
Hice Rock Progresivo en plan ópera con Clive Nolan (Arena) y Oliver Wakeman. Era algo muy serio, con muchos personajes. Luego hice otro también con Tobias Sammet (Edguy). Así que he intentado otras cosas, fuera del puro Hard Rock. Creo que podría expandirme a otros estilos. A lo mejor cantar Opera propiamente dicha como Pavaroti

(risas). Soy un gran admirador suyo. Si te refieres algo de verdad completamente distinto, sólo te puedo decir que la verdad es que no me interesa el Jazz o el Folk, no me veo haciendo esos estilos. Tiene que ser Rock, tiene que tener agallas, tengo que oír guitarras. Puede ser Rock operístico o Rock sinfónico pero al fin y al cabo Rock. Soy feliz haciendo lo que hago, aunque no me dan miedo los retos.

RLL.- Eres un vocalista realmente personal y distinto. Es difícil entrever las influencias que pudiste tener como cantante al comienzo de tu carrera. ¿Cuáles fueron?
BC.-
Uff, tú te refieres allá por el final de los sesenta, cuando yo era joven. No pienso mucho en ello, pero supongo que Mick Jagger fue muy influyente para mí. La verdad es que también me gustaba Elvis Presley, tenía una gran voz. Jagger nunca ha sido un cantante excepcional, pero como showman es inmenso, y verle a él sobre un escenario fue lo que en realidad me motivó para querer meterme en una banda sin necesitar ser tan bueno como Elvis. Luego vendrían Steve Perry, Ronnie James Dio, Paul Rodgers, Freddy Mercury… Siempre intenté escuchar y extraer las cosas buenas de cada uno, y mezclarlas. Corazón y alma, eso es lo que me atrae. Los cantantes que cantan con emoción, con convicción y poder, pero de forma natural. Es lo que intento hacer

 
     
 
 
     
 

yo, porque creo que es como se debe cantar. Ahora creo que soy demasiado viejo para que nadie me influya (risas), pero ahora es al revés. Hay quien dice que yo he sido influyente para él, y es maravilloso. Es como pensar que tengo que devolver lo que yo tomé.

RLL.- Asistí al concierto de Magnum en el Lorca Rock 2004, y también en vuestras actuaciones en el London Astoria en diciembre pasado. Se os veía claramente más cómodos en frente de un público menos numeroso. ¿Prefieres tocar en ese tipo de lugares más recogidos?
BC.-
Prefiero actuar en frente de gente. Tocar en grandes festivales es estupendo, pero la verdad es que hacerlo en clubs pequeños repletos te aporta una atmósfera muy especial. Aunque en número no haya mucha gente, sí que todos están amontonados, con el humo en el ambiente, la gente grita y hace mucho ruido. También sabemos lo que es tocar en grandes locales. Recuerdo cuando abríamos para Ozzy en Estados Unidos y habían 20.000 personas cada noche. Era estupendo. Hemos hecho festivales por todo el mundo, y lo cierto es que creo que no puedes comparar ambas

situaciones, son diferentes e igual de buenas. Lo que de verdad no soporto son los locales semi vacíos. A lo largo de nuestra carrera nos han sucedido muchas cosas, claro. Recuerdo por ejemplo un concierto en Italia, en el cual actuamos para 50 personas. Eso sí, eran los mejores cincuenta fans del mundo, y vivían la música. Cuando salí y vi aquello no me hizo ninguna gracia, pero la verdad es que luego el show se tornó muy emocionante. Eran medio centenar, pero lo recuerdo como un concierto brillante. Cuando sales al escenario en esas condiciones es como un atentado contra tu ego. Piensas “oh, todos me odian” (risas). No sé lo que ocurrió aquella noche para haber tan poca gente, pero pensándolo bien, ¡¡dame ese concierto cada noche!!. Cincuenta personas, pero la mejor gente del mundo. Dame cincuenta o dame cincuenta mil, no me importa, ya ves que soy de buen conformar.

RLL.- En aquel concierto del pasado diciembre en el London Astoria había muy poca gente joven. Vosotros habéis sacado un excelente último disco (“Brand New Morning (SPV-2004)”), y sin embargo parece que no existe respuesta por parte del público más joven. ¿Cómo se puede solucionar esta


situación?.
BC.-
El concierto de diciembre en Londres fue diferente de los anteriores. Habíamos hecho uno primero en abril, que supuestamente iba a ser único y del cual vendimos todas las entradas. Decidimos hacerlo una vez más, no sé si resultó ser una buena idea. Vendimos todo en algunos shows en Alemania y Escandinavia, y allí sí que había gente joven. Creo que existe una regeneración del público en este tipo de música, quizás no en Inglaterra, pero en Europa la cosa es diferente, definitivamente.

RLL.- Entonces, ¿qué pasa en Inglaterra?
BC.- No lo sé, pero insisto en que el concierto de abril fue diferente, no sólo en Londres sino en el resto del Reino Unido. Es cierto que en Londres la audiencia es más mayor, yo creo que me conozco a los fans uno por uno de otros años, pero en el resto de Inglaterra hay mucha gente joven, de verdad. Nosotros seguimos haciendo música joven. Es cuestión de que se transmita a través de los padres, de los hermanos, de los amigos, y por supuesto de las revistas y radios. Echamos de menos un poco más de atención. El Rock sigue siendo gran música, y nosotros seguiremos intentando humildemente que lo siga siendo.


 
     
 
© Copyright LOS RECUERDOS DEL UNICORNIO - Mayo 2006
 
     
 
Selecciona una nueva entrevista